Sugerencias
que pueden ayudar a los chicos/as en el primer día de clase
El fin de las vacaciones marca una nueva etapa en la vida de
toda la familia. Generalmente ofrecemos sugerencias a los padres y madres para
abordar este nuevo período de modo que la vuelta a las rutinas, las tareas y la
cotidianidad en general sea lo menos estresante posible para todos. Sin
embargo, este año queremos dar algunas sugerencias a los chicos y chicas, ya
que si queremos que vayan asumiendo responsabilidades propias como estudiantes
es importante que les ofrezcamos algunos recursos que les puedan ayudar.
Esto no significa que los hijos puedan prescindir de los
padres, especialmente aquellos que se encuentran en los últimos cursos de
primaria o los que están iniciando su tránsito hacia el bachillerato. Pero es
importante que vayan asumiendo ciertos comportamientos responsables y
aprendiendo a valorar los cambios como un espacio de nuevas oportunidades y
experiencias para crecer como personas.
Recomendaciones para los chicos y chicas que
inician un nuevo curso escolar:
Volver a la escuela y comenzar un nuevo curso escolar puede
resultar una etapa emocionante. Sigas o no en la misma escuela, comenzar un
nuevo curso abre infinidad de posibilidades; nuevos conocimientos, nuevos
profesores, nuevos compañeros y nuevas experiencias. Prepárate para que la
experiencia sea fantástica desde el primer día. Aquí te damos algunas
sugerencias.
1. Asume una
actitud positiva y acude con una mente abierta. Si vas a tu escuela de siempre te
reencontrarás con compañeros/as y amigos/as a los que posiblemente no ves desde
hace algunos meses, por lo que tendréis mil historia y anécdotas que compartir.
Si cambias de escuela, es el momento de poner en práctica tus habilidades
sociales. Preséntate a tus compañeros y
comienza nuevas relaciones. No te limites a relacionarte sólo con
compañeros de curso, amplia tu contexto a los “compañeros de colegio”. Esto
será un primer contacto para, posteriormente, ir construyendo los vínculos que
te permitir hacer nuevos amigos/as.
2. Conoce a
tus maestros y profesores. Generalmente, el primer día de clase los maestros se presentan al alumnado,
hablan en general del plan de trabajo que tienen preparado para desarrollar
durante el curso y; establecen las normas (de trabajo, comportamiento, etc.)
que esperan se cumplan en sus clases. Pon
mucha atención a todos estos datos. Si
lo necesitas toma notas, así podrás recurrir a ellas para aclarar o
recordar dudas que te puedan surgir a lo largo del curso. Si tienes diferentes
profesores o profesores por asignaturas, te puede ayudar la preparación previa
de unas tablas en las que puedes ir colocando la información importante a media
que el profesor la va suministrando. Utiliza un cuadro para cada asignatura o
para cada profesor, será más fácil consultar la información cuando la
necesites.
3. Participa
sin miedo cuando lo consideres oportuno. Bien sea para dar una opinión o para aclarar una duda. No te quedes callado/a. Tener una
información clara de lo que esperan de nosotros es fundamental si queremos
tener éxito en esta nueva etapa. Recuerda,
cada nuevo curso es una oportunidad llena de posibilidades de cambios. No
importa que pasó el curso pasado, este puede ser diferente, exitoso y
divertido, todo va a depender de nosotros mismos, de los recursos con los que
contemos, de nuestra actitud, de nuestro trabajo constante y, muy importante,
“de comenzar organizado desde el principio”.
4. Si vas a
un nuevo colegio, conoce sus instalaciones. Así, cuando comiencen las actividades regulares no perderás
tiempo en los desplazamientos entre aulas cuando te toque hacerlo.
5. Tanto si vas a una escuela nueva
como si vuelves a tu escuela de siempre, busca un tiempo para conocer o saludar al
personal de los diferentes departamentos: Bibliotecario/a,
orientador/a, psicólogo/a, personal de limpieza. La amabilidad y la cortesía
siempre son agradable y a la larga da sus frutos. Recuerda “Los buenos modales nos agradan a todos”. No se trata de
“hacer la pelota” a nadie, se trata de ser cortés y mostrar respeto a los
demás. Ten presente siempre que, “recogemos
lo que sembramos”.
6. Si tu
cambio implica el paso de primaria a secundaria te enfrentarás, con toda seguridad a un mundo desconocido para ti. Tranquilízate y no te agobies. Tus profesores y
tutores están al tanto de lo difícil que puede resultar esta situación y te ayudarán en todo para facilitar tu adaptación a la nueva
etapa. Sin embargo, si en algún
momento consideras que necesitas auxilio
especial, no dudes en acercarte a ellos y solicitar su apoyo. No tengas miedo ni te avergüences por pedir
ayuda.
7. Cada
escuela tiene sus normas o pautas para el primer día de clase. Asegúrate de
revisar cuales son las indicaciones de tu escuela para
el primer día, incluyendo los materiales o útiles escolares que debes llevar. Prepara tu mochila
la noche anterior tomando en cuenta
esas indicaciones. Y si decides hacer las fichas de cada profesor o asignatura
que te mencionamos en el punto 2, no olvides llevar unas cuantas para recogen
la información correspondiente. Recuerda también tu merienda o tente en pie (te ayudará a reponer energía). Deja preparado el uniforme o la ropa que te
pondrás ese día y haz una revisión
mental de lo que tienes que hacer antes de salir para la escuela
(ducharte, cepillarte los dientes, vestirte, desayunar, etc.), así podrás tener
una estructura y una medida aproximada del tiempo que necesitas antes de salir.
Evitarás conflictos y estrés matutino. Salir de casa con alegría y positivismo abre
muchas posibilidades para que nuestro día “vaya sobre ruedas”.
8. Ármate de
paciencia y se amable contigo mismo. Los cambios requieren adaptación y eso
necesita un tiempo.
Si sientes que cometes equivocaciones o que las cosas no salen tan bien como esperabas…”Calma”!!!!!...si eres constante,
perseverante y tienes claros tus objetivos, en pocos días las cosas empezarán a
marchar de maravilla.
9. Duerme
suficiente.
El sueño se calcula en
función de la edad. Sin embargo, una media estimada de 8 a 10 horas de descanso
es necesario si queremos ser intelectualmente productivos. Aprende a organizar tu tiempo para respetar tus horas de descanso diario.
10. Procura
desayunar antes de salir de casa. Te sentirás con más energía para comenzar el día.
11. Tomate
tu tiempo para realizar las tareas que te encomienden. Recuerda, “es preferible poco y bien
que mucho y mal”. Poco a poco, con práctica
y con la ayuda de tus profesores irás
mejorando tu rendimiento y el tiempo que tienes que dedicar a cada tarea irá
disminuyendo sin perjudicar la calidad del producto final. ¿Recuerdas
cuando comenzabas a montar bicicleta? ¿Cuánto tiempo podías permanecer en ella
sin caer?, y ahora que has aprendido, ¿Cuánto tiempo puedes permanecer en ella
sin caer? Todo es el resultado de la práctica. Los deberes escolares funcionan
igual, la disciplina y la práctica nos va dando habilidades que nos permiten
trabajar con más seguridad, y en menos tiempo para obtener buenos productos.
12. Si no
tienes claras las instrucciones para realizar una actividad…”Pregunta”. Y si aún tienes dudas, “vuelve a
preguntar”. Hazlo tantas veces como sea necesario hasta que tengas suficientemente claro lo que
esperan de tu trabajo o de tu comportamiento.
Si quieres saber más pincha es este enlace Haz que tu hijo llegue a la escuela con optimismo
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